Más de 400 carabobeños recibieron a Jesús en sus corazones

(Prensa El Evangelio Cambia 26 de octubre de 2020).-En los municipios Juan José Mora, Naguanagua, Puerto Cabello y San Diego, más de 400 personas oraron a Dios con el fin de que Jesús entrase en sus corazones, y más de 500 recibieron alimentos preparados por parte de los voluntarios, tomando en cuenta todas las medidas preventivas ante la propagación de Covid-19.

En el municipio Juan José Mora, de Morón, 125 personas disfrutaron de alimentos preparados, específicamente en el sector 3 de la comunidad Palma Sola, espacio en el también fueron anunciados los valores de Jesús, y unas 20 personas tomaron las determinación de empezar a accionar en ellos. En esta actividad, voluntariamente uno de los vecinos, decidió sumar sus manos para empezar a colaborar con este tipo de labores.

En el municipio Naguanagua, el voluntariado se desplegó en el sector de Las Trincheras, lugar en el más de 300 personas recibieron con atención el mensaje de valores cristianos, y oraron con el objetivo de recibir el amor de Jesús. En esta jornada fueron entregados más de 200 platos de sopa, 28 personas recibieron el servicio de corte de cabello y cinco niños el donativo de juguetes.

En Puerto Cabello, el equipo de evangelizadores se trasladó al Hospital Prince Lara para llevar el mensaje de fe y esperanza de Jesús, siendo 99 personas las contagiadas con el amor de Dios, en esta misma visita fueron repartidos 132 platos de sopa, y más de 60 vasos de agua potable. Tres personas manifestaron que al momento de hacer la confesion de fe en Jesús, sintieron algo sobrenatural, la presencia de Dios manifestada en sus vidas.

En la parroquia Juan José Flores de la zona porteña de Carabobo, a 29 personas se les predicó el mensaje de Jesús, y le aceptaron como su Señor y Salvador, entre ellos jóvenes quienes iban de camino a su lugar de trabajo, y privados de libertad, quienes lograron su libertad espiritual a través del amor y perdón de Jesús que recibieron en sus corazones.

En San Diego, ocho privados de libertad, quienes se encontraban en la Policía Municipal de San Diego, decidieron pedirle a Jesús que tomara contro de sus vidas, luego de escuchar el transformador mensaje del amor de Dios. Asimismo, fueron entregados más de 60 platos de asopado de granos en el recinto.

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